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viernes, 5 de agosto de 2022

LAS POEMAS MAS TRISTES DEL MUNDO A MAMA








Cuantas veces llore, al saber que mi mama
Se había alejado de mi presencia, por qué solo con decir ahí estoy, calmo mi miedo
Con solo decir te amo, abrigó mi ser entero.

Cuantas veces te vi sonreír, tu sonrisa de amor
Me alejo mis noches de tristeza y de arduo dolor,
Porque solo con tu sonrisa me das aliento de existir
Me das aliento de compartir

Madre el tiempo pasó, iba creciendo
Monstruosamente, entre la hierba de mi infancia,
Siento alegría al recordar las noches e que
Me decías te amo hijo mío, eres mi todo

El amor puro de tus ojos que  destellaban en mi rostro
Tal cual fuera como el reflejo de una laguna hermosa.
Ese  amor que lavaba las manitos más tiernas
  Que cada mañana amanecías sobre mí, como las flores de primavera.

Madre al tocar mis manos, las mías recuerdo los del bebe
Aquellas tiernas manos  mágicamente pasaban mi cabellera,
Dejaban cristalinas de olor de unja verdadera mujer
Que ternura fue, el aliento que besabas en la mejilla




Donde te fuisteis madre

Al ver traer las flores de otros niños
En tu  día  más hermosa de la vida
Salen de mis ojos cataratas de lágrimas
al no tener sus ternuras manos en mí.

Que habrá sido de mí, que tú me dejaste
Que tengo ganas de abrazarte y besarte,
De gritarle al universo ella es mi mami
De gritar a los campos ella es la que me crio.

Solamente entro a mi salón para dejar el rostro de mis lágrimas
Que cada instante, que brotan como de una peña hermosísima
Que deslizan mi rostro tan paulatinamente.

Madre, madre, grito al mundo entero
Dios porque llevaste a mi madre
Con ella estaría feliz y satisfecho
De haber venido a este mundo.

Que habrá sido de mí, al no tenerte junto a mí
Que pecado  hice, para  no ver tu rostro
Porque te fuiste antes de tu día,

Carta de mama

Muchas veces llorando
Al saber que mi madre se fue
Buscando cerros quebradas
Ya no hallare tal amor.

Me decía su voz, cuida a tus hermanos
Ya me  voy a morir
Recuerdo su voz que me decía
Una y otra vez
Cuidad a tus hermanos

Me decía llorando
Que las lágrimas deslizaban
Por sus mejillas llorando me decía
Hijo mío yo te amo.


Ven madre mía
No me dejes por favor
Que sería sin ti
Lloraría por todo el mundo
Sufriría en  manos extraños
Oh quien me diría
¡Ven a mis brazos!


Buscare hasta el último suspiro

Hasta cuando mama
Te olvidarás para siempre
 Hasta cuando mama
Esconderás tu rostro de mí,

Hasta cuando pondré mis lágrimas
En mi alma,
Con tristeza en  mi corazón cada día,
Hasta cuando
Será enaltecido mis compañeros contra mí,

Diciéndome:
Mirad allá viene el hijo sin madre
Entre risas se dicen entre ellos,
Mirad el huérfano
No tiene a quien  decir
Madre mía.

Yo solo digo: buscare a mi madre
En las calles, en las plazas
Hasta acabar mí último suspiro,
Encontrare para gritar al mundo, ahí tengo
A mi madre

Madre solo un día, quisiera verte
Solo un día  déjate ver
Para decir, que tal vez fue cruel contigo
Solo un día
Solo un día
Déjate ver madre.


Niño en la tumba

Madre porque me dejaste
Sin decirme algo
Por favor despierta,
Abre tus ojos.
Te vas, te vas sin decirme algo.

Recuerdo  al llegar a este lugar
Ya te querían enterrar,
Y yo como loco me  abalance hacia tus brazos
Sabiendo que por siempre te perdería.

Al ver este tumulto de gente
Que te rodeaba, para encerrarla de una vez,
Yo grite, gritos de dolor
Que me agobiaban mi garganta, y ahogaban mi rostro.

Madre porque me dejaste
Sin decirme algo.
Acaso querías irte sin decirme algo
Tu eras la razón de mi vivir, no te alejes de mí.

Acaso tú piensas que en unos días
Me podre olvidarte de ti y de tu amor,
No madre, cada  segundo domingo de mayo
Al ver las rosas no crees que llorare.

No me dejes por favor
Mirad aun somos niños indefensos,
Que será de nosotros, quién cuidara de mí,
Quien nos cubrirá de frio y de dolor.

Tu estarás en el cielo gozando,
Y nosotros llorando por el amor de una madre,
No nos muestres tu indiferencia
Madre querida, madre adorada.





Mama a mi lado

En todo momento
Mi madre como un monumento,
Siempre  está en mi lado
Sin ningún lamento

Es mi madre que prepara condimento
Para cocinar con un pimiento
Un producto sin vencimiento
Que compro del mercado del convento.

En mi madre que toma te de mentó
En un madrugada del domingo
Junto a mi tío Mario,
Que se mareo en un día feriado.



Ruego de  un niño
Madre te adoro
Eres como la flor,
Que crece sobre el arroyo
Por ello  yo a papá lo ruego,

Si cuando lloro los dos son tristes
Si me rio su rostro es risueño
Mi risa es para ellos como la cura,
mi lloro es para ellos como un  infierno.

Cada día ellos
Procuran de mi vida
Que hijo que nos dios
Para luego, cuando sea grande le diré a dios.


Trabajo de mama

Mi mama
Usa delantal
Para cocinar
 Una sopa.

Que encanta a mi papa
Y nadie la espanta
A La reina de la casa.


Y mama comenta
Que hizo te de menta,
Para acompañar con pimienta
Y arroz con huevo  a la cubana.

Qué lindo trabajo
Que sus manos le faltan
, con uno coge al bebe,
Con otro al teléfono,
Su mirada a la olla
Sus dedos a la cebolla

Y termino su trabajo como reina
Su trabajo del día,
Luego se ira
A descansar como una bella.
Quiero estar junto a mama

Quiero estar junto a mama
Abrazándole en ese día
Quiero recordar mi infancia
Para decirle mamita te quiero.

Quiero estar junto a mi mama
Para darle  un ramo de flor,
Para darle un aliento en su corazón
A madre querida que sufre sin razón.

Que sentir la miradita de mama
Cuando cocina la riquísima mana,
Estar a su lado junto a mi mama
Que me miran a donde voy.


Cuando el sol sale, el sol florece,
Cuando la luna sale, el agua brilla.
Cuando vivo con mi madre
El amanecer resplandece.


Que puedo hacer



Mamita en tu día no puedo hacer nada,
Quien dirá yo te amo mucho, quien dirá
Traeré pues rosas de ocho kilómetros
O traeré jazmines de treinta.

 Cuando al escuchar el trino de los pajarillos
Traería muchas flores
O Cuando el agua bajaba de la catarata
Traería  pues para hervir.
Quien dirá pues yo.

Mama ni trayendo flor
Estaría tranquilo.
Mama ni trayendo agua
 Caminaría feliz.
Quien dirá pues, qué  estará feliz.

Escalando cerro arriba o la más alta
Clamaría a gran voz por ti,
Para que estés sana y salva
Y que vivas en todos los días de mi vida.

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